sábado, 27 de septiembre de 2008

¿Cuántos orgasmos femeninos existen?

¿Cuántos? ¿Cómo? ¿De qué intensidad? El orgasmo femenino ya no es un secreto.

Para Sigmund Freud sólo había uno válido, el vaginal. Y cualquier otro orgasmo, como el provocado por la estimulación del clítoris, era inmaduro o sencillamente inexistente. De lo que se deduce que el psiquiatra vienés podía saber mucho acerca de los secretos de la mente pero no tanto sobre las mujeres.

Luego vino el punto G y todas a buscarlo para cumplir con el tópico que encadenaba el orgasmo con el coito. Más tarde, la aparición de la multiorgasmia puso a todas las mujeres a contar cuántos, en lugar de estar atentas a lo que podían sentir, que es lo importante. Y cuando se descubrió que las mujeres podían eyacular, rizamos el rizo queriendo imitar a los hombres en eso de llegar hasta el final. Con tal avalancha de posibilidades, la pregunta es ¿cuántos tipos de orgasmos femeninos existen?

Lamentablemente, no hay unanimidad. Algunos expertos defienden la teoría de que hay dos tipos de orgasmo femeninos y nada más que dos (clitoridiano y vaginal); otros, como Master y Johnson, sostienen que en realidad todo orgasmo tiene que ver directa o indirectamente con el clítoris (que es como decir que sólo hay uno); y los hay que cifran en diez las clases de orgasmo que podemos llegar a experimentar, según el punto de “origen” del estallido del orgasmo femenino.

En esta corriente se sitúa Lou Paget, terapeuta estadounidense, investigadora sobre la sexualidad y autora de Cómo darle (a ella) placer absoluto. Nos preguntamos, en serio ¿cuántos tipos de orgasmo hay? y encontramos una clasificación poco dogmática y, sobre todo, muy optimista, por eso hemos decidido tomarla como orientación. Pero sin perder de vista lo fundamental: todo está en la mente y tu cuerpo lo sabe.

Pero después de todo, si alguien te dice que puedes tener diez clases de orgasmos diferentes, ¿por qué no prestarle atención?


26 de septiembre de 2008 (cosmohispano)