martes, 29 de junio de 2010

Suicidios adolescentes ¿por qué?

Desde comienzos de abril al día de hoy, cinco adolescentes de entre 12 y 14 años –tres chicas y dos varones– se ahorcaron, y otros cinco fracasaron en el intento. Al principio se asoció la ola de suicidios al llamado choking game, un juego mortal que, aparentemente, los jóvenes conocían y seguían a través de internet. Pero sólo se pudo comprobar que una de las chicas, Fiorella, habría accedido a tal juego. En cambio, hoy todo parece indicar que es la coyuntura social y familiar que viven los adolescentes en este pueblo salteño de 30 mil habitantes –a 175 km. de la capital de la provincia– el factor clave para intentar comprender las motivaciones de este drama que conmociona al país.
Cada vez que suena la sirena de los bomberos o la ambulancia, el pueblo se sobresalta, y una pregunta se susurra por lo bajo: “¿Otro más...?”. Desde hace unos días, en Rosario de la Frontera –un pueblo de 30 mil habitantes, ubicado a 175 kilómetros de la ciudad de Salta–, se asocia directamente el sonido de la sirena con el hallazgo de un nuevo adolescente sin vida, ahorcado.
Desde el 7 de abril al cierre de esta edición, son cinco los chicos ahorcados y otros cinco (cifra oficial, extraoficialmente se habla de veinte) lo intentaron. ¿Por qué ocurre este drama colectivo? ¿Qué impulsa a jóvenes de entre 12 y 14 años a quitarse la vida, y por qué de esta manera?

Primero se habló de un juego difundido a través de internet, el “choking game” o “juego de la muerte”, pero luego se lo desestimó o, en todo caso, se lo colocó en el lugar de desencadenante. “Pueden darse casos de choking game, un juego a través del cual durante algunos segundos el cerebro no recibe oxígeno y se produce un estado de éxtasis similar al efecto que producen algunas drogas. Podría pensarse que se trata de un juego irresponsable, de adolescentes que no le tienen miedo a nada.

Pero además estamos investigando si algún adulto está instigando a los chicos a acceder al juego y luego suicidarse”, explica Mario Dislacio, juez de instrucción de Metán, Salta, a cargo de la investigación. “Creo que el juego es un desencadenante, pero hay otras cuestiones de fondo que tendrían que ver con la familia. Los adolescentes están en una situación vulnerable. Que un chico se sienta atraído por un juego que incita a la muerte, está hablando de una sociedad especial. Hay que estar atentos a las señales”, asegura Claudia Roman Ru, secretaria de salud mental y abordaje integral de las adicciones en Salta, quien está al frente del comité de crisis a cargo del plan de contención.

DEMASIADO JOVENES PARA MORIR. La primera fue Fiorella Nicole Gómez (13). Su mamá la encontró colgada del tirante del techo de su cuarto, el 7 de abril pasado. Se habría impulsado desde la cucheta superior y se habría roto el cuello. Iba a 9º año de la Escuela de Comercio Nro. 5009 Nuestra Señora del Rosario. Según la policía, se comprobó que fue la única –hasta el momento– que había accedido al “choking game” o “juego de la muerte”.

Lucía Belén Subelza también iba al mismo colegio. Cursaba el octavo año y tenía 13 años. El sábado 5 de junio su hermana la encontró colgada de la cucheta con sus pies apoyados en el suelo. Después fue Mario Roldán, un chico de 12 años. El 9 de junio apareció colgado de un árbol en un basural cercano al barrio Ramón Abdala, en las afueras del pueblo. Tenía problemas familiares graves: su mamá lo había abandonado. Dejó una carta dirigida a su maestra: “No puedo ser feliz”, escribió. Para la policía, en este caso, no había dudas: fue un suicidio buscado. Al día siguiente, el 10 de junio, Macarena González se ahorcó colgándose de un caño del baño. Casualmente era amiga de Fiorella y concurría también a 9º año de la escuela 5009. Ariel, su papá, es mozo, y Sandra, su mamá, trabaja en una casa de té. Antes de morir atinó a escribir: “Todo fue tan poco…”.

El último caso ocurrió el 21 de junio. Un chico de apellido Godoy apareció de rodillas, colgado de un árbol en la finca donde su papá se desempeña como peón. Tenía 13 años y durante la semana permanecía pupilo en una escuela rural, a 80 km. de Rosario de la Frontera; los fines de semana los pasaba con sus padres y hermanos en la finca Pozo Verde, en la localidad El Naranjo, a 8 kilómetros del pueblo. Había almorzado y le dijo a su mamá que iba a buscar un caballo. A las 14 lo encontraron muerto.

“Tres de los casos fueron chicas que concurren a esta escuela”, afirma María Luisa León, que desde hace 40 años es directora de la Escuela de Comercio Nº 5009 Nuestra Señora del Rosario. “Lo que está pasando acá es una conjunción de cosas”, advierte. Ella misma habló individualmente con cada uno de los chicos que asisten a su escuela. “Me hablaron del juego de Internet. Cambia de nombre todo el tiempo, le dicen ‘choke game’ o ‘el ahorcadito’. Consiste en superar determinados pasos. Los chicos me aseguraron que nadie ingresó en la página, pero todos saben de qué se trata”, le comenta a Para Ti.

Ella sospecha que algún adulto ingresó a los chicos en el juego. “Desde marzo, los chicos se cortan los brazos, se hacen rayones con un cúter y se graban las iniciales de sus nombres en las piernas. Estos son supuestamente pasos para llegar a la parte en la cual en la página enseñan a hacer los nudos para ahorcarse”, explica León. Algunos aseguran que para poder acceder al juego hay que dar el número de documento y que esto funciona como filtro, ya que solamente pueden ingresar chicos que tienen entre 10 y 14 años. “Los chicos que se animan a jugar y sobreviven, dicen que le ganaron a la muerte”, detalla Roman Ru.

Los celulares (en Rosario de la Frontera casi todos los chicos tienen el propio) parecen ser la clave. A los chicos les llegan mensajes de texto tales como “te tenés que matar”, “vas a ser el próximo, nosotros te vamos a decir cuándo”. Y algunos aseguran que una voz masculina los incita a suicidarse del otro lado del teléfono. En dicha página de Internet, a los chicos se les enseñaría a hacer ocho nudos que con el peso del cuerpo –una vez que la persona se desmaya– supuestamente se desatarían.

EL MIEDO Y LA SUPERSTICION. “Un chico me dijo: ´No me pida que le cuente, tengo mucho miedo, no sé lo que me puede pasar... Es como una fuerza extraña que te atrapa, tengo miedo que a mí me pase lo mismo que a los demás´”, cuenta León. El fenómeno es alimentado por historias de satanismo, magia negra y oscurantismo. “Muchos chicos dicen que se metieron en el juego y que llegan hasta el círculo blanco. Algunos vieron a una mujer de pelo blanco, que no es del pueblo, en los entierros”, comentan los chicos en rueda de amigos. “Por lo general, cuando uno no encuentra explicaciones racionales a algo que está ocurriendo, busca respuestas en lo mágico. A esta gente le angustia mucho no entender lo que está pasando”, intenta explicar Roman Ru.

Macarena se ahorcó en un rincón del baño con una bufanda. Vivía en el barrio municipal nuevo “125 Viviendas”. Su familia se había mudado allí hacía dos meses. En el poste de luz frente a la puerta de la casa de los González alguien escribió: “Makka no te vamos a olvidar”, con tizas de colores. “No quiero hablar. Esto pasó hace una semana. Se tendría que haber hecho algo para evitarlo”, es lo único que atinó a decir Ariel, su papá, a Para Ti. Macarena vivía a seis cuadras de la casa de Fiorella.

La muerte de Macarena, la cuarta de la serie fatal, fue desvastadora para chicos y grandes. En la escuela de comercio, todos lloraban y tuvieron que armar un gabinete psicológico de emergencia. “Vivimos asustados. Cada vez que escuchamos la sirena de los bomberos o la ambulancia, decimos otro más. Esta última semana dicen que hubo 20 intentos. Algunos papás decidieron no mandar a sus chicos al colegio; otros piden que las maestras les den mucha tarea para que no tengan tiempo ocioso –cuenta León–. Te sentís inútil. Provoca mucho dolor estar en medio de esto y no poder hacer nada”.

El Ministerio de Salud de Salta organizó un comité de crisis que trabaja con padres y chicos. Psicólogos y psiquiatras están abocados a contener a las familias. “Esta semana está mucho más tranquila que la anterior, en la cual había mucha paranoia y angustia. Pero los sistemas de alerta están a flor de piel y a veces cualquier estímulo mínimo genera ansiedad y angustia. Se dieron varios casos de denuncia de papás que no sabían dónde estaban sus hijos, y después se enteraban que estaban con amigos o en el ciber”, cuenta Roman Ru.

“Que esto sea una toma de conciencia para todos los chicos adolescentes de Rosario de la Frontera. Mírense al espejo si tienen pensado quitarse la vida. Piensen en las vidas que sufrirán y también en lo que perderán. Mírense a los ojos y díganse a ustedes mismos: lo puedo superar...”. Esto dice uno de las decenas de afiches en cartulina colgados en las paredes de la escuela de comercio. En todos se repite la palabra “vida” y es parte del plan de contención que organizaron en la escuela.

El pasado 16 de junio se organizó una reunión de padres en la misma escuela. “Tenemos que pensar qué nos está pasando. Hay falta de atención social y familiar. ¿Por qué los chicos llegaron a esto? ¿Por qué tienen miedo y no confian en nosotros?”, le comentó Elsa, una mamá a Para Ti. “Estamos asustados y muy preocupados. Fallamos como papás. Queremos ser amigos de nuestros hijos y darles todo. Ahí fallamos. A veces los papás queremos tapar el sol con un dedo. El problema acá es la falta de valores”, agregó Susana, otra mamá. “LA PISTA DEL BAILE”. Alguien dijo que había un sospechoso que instigaba a los chicos mandándoles los mensajes de texto. Se habló de una persona de 18 años, coreógrafo, que entrenaba a los chicos de la Escuela de Comercio cada vez que se organiza el festival “Bailando por un diez”. Y todo el pueblo señaló a Albino Svalza, casualmente hijo de uno de los policías integrantes de la brigada que lleva adelante la investigación.

“Ensuciar a alguien con algo tan dramático, es duro. Conocía a las chicas, pero no tengo nada que ver con lo que pasó. Quieren buscar un chivo expiatorio para echarle las culpas de lo que está pasando, pero la realidad es que todos debemos hacernos responsables como sociedad”, le dijo Svalza a Para Ti.

“Pueblo chico, infierno grande”, dice la frase. Y Rosario de la Frontera no es la excepción. Los rumores corren como reguero de pólvora. Para Ti fue testigo de cómo el pueblo se hacía eco de una versión falsa: decían que Albino había sido detenido precisamente a la hora en que lo estábamos entrevistando. Lo cierto es que no había sospechosos, sino un chico –que no es Albino– que había participado del juego, se había grabado en su celular desmayado con la corbata al cuello y, asustado, había ido a la policía con el video para ofrecer su ayuda en la investigación. R.A. (son las iniciales de este chico de 18 años, que enseñaba hip-hop en la escuela de Comercio) está muy deprimido y bajo tratamiento psicológico.

“Se asustó porque se encontró filmado en su celular mientras se estaba ahorcando. Se desmayó y no recuerda bien qué pasó”, le contó a Para Ti su mamá, Mónica. “Es muy callado. Está deprimido porque quiere estudiar ingeniería informática en la Universidad de Tucumán, pero mi marido se quedó sin empleo y no tenemos dinero para mandarlo a estudiar. No sabíamos qué estaba tan mal. Este es un pueblo muerto para los jóvenes”. BUSCANDO UNA EXPLICACION. Gustavo Nervo es médico de guardia del hospital Melchora Figueroa de Cornejo, el único del pueblo. “En los últimos meses aumentó la incidencia. Tuvimos un intento por día, y actualmente tenemos tres chicos internados”, le asegura a Para Ti. Según Roman Ru “es esperable que surjan tentativas de ahorcamiento porque la conducta es contagiosa. La comunidad está muy movilizada con todo esto y se da una especie de ola. Por eso hay que estar atentos para contener y evitar que haya más situaciones que lamentar”.

Nervo ensaya una hipótesis acerca de lo que podría estar pasando en Rosario de la Frontera. “Acá hay mucho ocio, y ese es un factor importante. Una gran desocupación, muchos casinos tragamonedas y poca gente con trabajo fijo. El drama está en la familia. Los chicos tienen grandes carencias afectivas. Este es un problema social, no se arregla desde la salud. Es una cuestión social profunda”. Advierte que los casos de ahorcamiento movilizan sensaciones y señala que esta vez no se respeta el comportamiento habitual: “acá se ahorcaron más chicas que varones, cuando generalmente es al revés”, aclara.

Según la Dra. Gloria Aban, directora del hospital, “hay muchos problemas que están de las puertas para adentro, que la gente no conoce. Existe una cuestión mucho más profunda que tiene que ver con el deterioro de los lazos familiares. Los chicos encuentran en internet la contención que no encuentran en la casa. La culpa es de la familia. Vemos la punta del iceberg pero no lo que está por debajo”. Para ella, “tiene que haber respuestas a corto, mediano y largo plazo. Esto no se soluciona ahora. Puede ser que baje la cantidad de casos, pero acá hay que implementar políticas públicas claras dirigidas a los adolescentes”.

Roman Ru, por su parte, concluye diciendo: “Veo a la comunidad mucho más organizada. Esto va a llevar un tiempo. Habrá que capitalizar lo que pasó para que no vuelva a ocurrir. Está planteada la necesidad de revisar cuestiones y analizarlas para tener una comunidad mucho más saludable”.
Para Ti, Textos: Daniela Fajardo. Fotos: Axel Indik (enviados especiales a Rosario de la Frontera, Salta).

Cómo cuidarte

¿Cuándo visitar al ginecólogo?

“Entre seis meses y un año después de tener la primera relación sexual se hacen controles ginecológicos”, nos explica la ginecóloga y especialista en patología vulvar del Hospital Italiano, Claudia Marchitelli. Claro que, si tenés algún inconveniente o malestar, debés visitar a un profesional.

¡Hablá con ellos!

La médica asegura que lo ideal es que la primera conversación sobre sexualidad la tengas con tus papás pero, si ellos no se sienten cómodos o no saben cómo responder a tus preguntas, pueden consultar con un especialista. Muchas veces, los padres tienen miedo de hablar sobre sexo con sus hijos. Contales que los chicos que más información manejan sobre el tema son los que más tarde se inician sexualmente y lo hacen de una manera sana y responsable. ¡Seguro los convencés de tener una charla!

El preservativo, ¡siempre!

Es lo único que evita el contagio de las enfermedades de transmisión sexual, como el VIH/SIDA y el HPV. Tenés que usarlo sí o sí, por más que elijas acompañarlo de otro método anticonceptivo.

Métodos anticonceptivos de barrera

El preservativo masculino: Si está bien colocado, tiene una altísima eficacia y, además, te protege de las enfermedades de transmisión sexual. Tené en cuenta que:

➔ No puede llenarse de agua antes de usarlo para probar si está pinchado.
➔ No debe quedar expuesto al sol.
➔ Tiene fecha de vencimiento.
➔ No hay que abrirlo usando los dientes porque se puede romper.
➔ No tiene eficacia si estás usando óvulos por un tratamiento (hay que consultar con el ginecólogo).
➔ Si se utiliza con lubricantes, éstos deben ser a base de agua.
➔ Una vez que se produce la eyaculación, el varón debe retirarlo rápidamente de la vagina porque el pene se vuelve fláccido y se puede volcar el semen.
➔ La puntita que tiene el preservativo debe quedar vacía al colocarlo en el pene. Es el espacio que se deja para el semen, sino se puede romper fácilmente.


Otra opción es el preservativo femenino, pero es más costoso, másdifícil de conseguir y su utilización es menos cómoda.

El diafragma es un aro recubierto por látex que se coloca en la vagina antes de tener relaciones y se saca hasta ocho horas después. Se usa con cremas espermicidas. Los ginecólogos enseñan a sus pacientes cómo colocarlo correctamente para que el método funcione sin problemas.

Métodos químicos

Los espermicidas: son cremas u óvulos que destruyen la envoltura de los espermatozoides y alteran su movilidad o los matan. No son recomendados para usar solos: ¡más del 50% de las mujeres que los utilizan quedan embarazadas!

Métodos hormonales

Anticonceptivos orales: son las famosas pastillas y su eficacia es del 99% porque son anovulatorias. Esto significa que inhiben la ovulación. Además, alteran el moco cervical del cuello del útero y evitan que los espermatozoides asciendan.

Mitos acerca de las pastillas

No hay que tenerles miedo.
No engordan.
No aumentan el vello.
No producen acné.
Es un método totalmente reversible: no altera la fertilidad.
Previene el cáncer de ovario.
No es necesario hacer descansos.


El día después: los anticonceptivos de emergencia no deben ser utilizados como un método anticonceptivo frecuente (porque perturban tu ciclo menstrual). Sólo debés tomarlos cuando falló el método regular (se rompió el preservativo y tomaste mal la pastilla anticonceptiva, por ejemplo). Cuanto antes lo tomes, más alta es la eficacia (entre el 75 y 89%). Se recomienda que sea antes de que pasen tres días de la relación sexual o cinco cómo máximo. No son abortivas.

El DIU: el dispositivo intrauterino tiene una eficacia del 98% pero no es muy recomendado para las chicas más jóvenes. Se trata de un aparatito con forma de espiral y recubierto por cobre que los ginecólogos colocan en el útero. Actúa como espermicida e inhibidor de la implantación del óvulo.

Métodos naturales

Chequear las fechas de ovulación en el calendario o el coitus interruptus, ¡no funcionan! “Son el mejor método para que una chica quede embarazada”, nos explica la médica.

El derecho a cuidarte: cualquier persona –incluso si sos menor de edad y no estás acompañado por tus papás– puede ir a un hospital a pedir preservativos o pastillas anticonceptivas. Es uno de los derechos que establece la Ley Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable (Ley 25.673).

Informate más:

➔ Hospital Italiano, Centro de la Mujer, Sección Adolescencia: Potosí 4135, Cap. Tel.: 4959-0200 (int. 8573/8293). Web: www.hospitalitaliano.org.ar

➔ Hospital de Clínicas José de San Martín, Programa de Adolescencia: Av. Córdoba 2351 (PB D), Cap. Tel.: 5950-8475/6. Web: www.hospitaldeclinicas.uba.ar. E-mail: programaadolescencia@hospitaldeclinicas.uba.ar.

➔ O acercate al centro de salud u hospital público más cercano a tu casa y pedí más información.

para teens, Texto Soledad Cotelo

jueves, 24 de junio de 2010

Un nuevo horizonte para el cancer

Cada año, el congreso anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, según sus siglas en inglés) genera mucha expectativa debido a que allí se presentan las terapias y los nuevos tratamientos relacionados con el cáncer y su biología. ASCO 2010 se llevó a cabo en el Mc Cormick Place de la ciudad de Chicago, entre el 3 y el 8 de junio. Reunió a más de 30 mil profesionales de la salud y el tema de este año fue “el avance cualitativo a través de la innovación”.
“Nuestra creciente comprensión de los complejos comportamientos del cáncer está siendo traducida en mejores y más certeras drogas contra una gran variedad de tumores”, declaró el Dr. Douglas W. Blaney, presidente de la 46ª reunión de ASCO, profesor de medicina y director médico del Comprehensive Cancer Center en la Universidad de Michigan. Y agregó: “Estamos desarrollando tratamientos cada vez más personalizados para todas las edades y los tipos de cáncer, aprendemos cómo usar estos tratamientos para que sean cada vez más eficaces e identificamos nuevas formas para ayudar a los pacientes a vivir más tiempo con una mejor calidad de vida”.

Este año se destacaron dos novedades relacionadas con el cáncer de ovario. Una fue la presentación del nuevo uso de una droga que resultó eficaz contra el cáncer de ovario. “Este es el primer adelanto trascendental relacionado con el cáncer de ovario desde hace quince años”, le aseguró a Para Ti el Dr. Enrique Díaz Cantón, oncólogo de FUNDALEU y del CEMIC. El de ovario es el tercer cáncer ginecológico más común, luego del de mama y de cuello de útero, pero es el más difícil de tratar ya que el 65% de los casos es detectado en forma tardía y en estadíos avanzados. Cada año afecta a 230 mil mujeres en todo el mundo, de las cuales mueren 140 mil. En Argentina, el estadío más común en el momento del diagnóstico es el III y el IV (el I es el estadío primario, y el IV el más avanzado).

Según la Asociación Argentina de Ginecología Oncológica aproximadamente 3 de cada 4 casos se diagnostica cuando ya están avanzados y el pronóstico es severo: el 80% muere en un plazo de cinco años. Por eso, entre los datos más prometedores de este congreso, se destacó el estudio sobre la nueva aplicación de una terapia biológica ya utilizada en otro tipo de tumores (colorrectal, mama, pulmón de células no pequeñas y riñón) que es eficaz para retrasar la progresión de la enfermedad. Robert Burger, investigador de Grupo Oncológico Ginecológico (GOG) llevó adelante el estudio (denominado GOG 0218) y el fármaco en cuestión es el anticuerpo monoclonal bevacizumab (cuyo nombre comercial es Avastin, fue desarrollado por el laboratorio Roche y ya se aplica en otros cánceres desde hace cinco años).

Esto puede cambiar las pautas de tratamiento ya que “es la primera vez que un agente antigiogénico consigue mejorar la supervivencia libre de progresión de esta enfermedad tan difícil de tratar”, comentó el Dr. Burger. “Esta droga inhibe la vascularización de las células tumorales (este es el proceso de angiogénesis, el cual permite el crecimiento de los tumores) en combinación con quimioterapia dada en forma recurrente y secuencial en pacientes que ya habían sido operadas en cáncer de ovario en estadíos avanzados. Lo que se vio fue que el uso del bevacizumab disminuyó la posibilidad de progresión, lo cual es altamente significativo”, explicó el Dr. Díaz Cantón.

“Es una droga muy promisoria porque ataca el mecanismo que tiene el tumor para poder crecer: la angiogénesis”, aseguró la Dra. Liliana Zamora, oncóloga clínica del Servicio de Ginecología del Hospital Italiano, quien también participó de ASCO. Y explicó: “Los tumores tienen la capacidad de producir un agente que es el Factor de Crecimiento Endotelial Vascular (VEGF), una proteína clave para que se produzca la angiogénesis, es decir, crezcan en forma desmedida los vasos sanguíneos que alimentan el tumor. El bevacizumab frena este mecanismo”.

Uno de los acontecimientos críticos necesarios para que se produzca la metástasis cancerosa es el crecimiento de una nueva red de vasos sanguíneos (angiogénesis). La metástasis es la capacidad de las células cancerosas de penetrar en los vasos sanguíneos y linfáticos, circular por el flujo sanguíneo, y luego invadir otros tejidos sanos y crecer. El VEGF es una proteína que, si bien posee muchos efectos beneficiosos para el organismo, ante la presencia de un tumor se transforma en su aliado cumpliendo un rol fundamental en la generación de nuevos vasos sanguíneos que transportan nutrientes y oxígeno para la progresión del desarrollo tumoral.

En el cáncer de ovario, los niveles elevados de hormona leuteinizante y hormona estimulante del folículo (hormonas que se activan con cada ciclo menstrual y regulan el ciclo ovulatorio), incrementan la expresión de VEGF y contribuyen a la angiogenésis de la enfermedad.

En el estudio participaron un total de 1.873 mujeres, con una edad media de 60 años, que padecían cáncer de ovario en la fase más avanzada (N. de R.: toda droga nueva se comienza a estudiar en los casos clínicos más avanzados para después llegar a los iniciales), con metástasis o carcinomatosis peritoneal. Se dividió a las pacientes en grupos: unas recibieron quimioterapia sola, y otras, combinada con bevacizumab. Estas últimas vivieron en promedio 14,1 meses sin que el cáncer creciera comparado con los 10,3 meses que tuvieron las mujeres que sólo recibieron quimio. Se concluyó que aquellas que recibieron el tratamiento combinado tuvieron una mejora del 39% en la sobrevida libre de progresión (se llama así al tiempo que transcurre sin que progrese la enfermedad). De esta manera se demostró que Avastin es la primera terapia que resulta ser beneficiosa en el cáncer de ovario.

“El tratamiento combinado con bevacizumab y doble quimioterapia con carboplatino y paclitaxel, seguido de un tratamiento de mantenimiento con bevacizumab en monoterapia, prolonga la supervivencia sin progresión en las mujeres con cáncer avanzado de ovario sin tratamiento previo, en comparación con sólo la doble quimioterapia con carboplatino y paclitaxel. El estudio GOG 0218 es el primer ensayo de fase III con un antiangiógeno para el cáncer avanzado de ovario que satisface el criterio principal de eficacia. Los resultados obtenidos ponen de manifiesto la importancia de continuar el tratamiento con bevacizumab después de haber completado el tratamiento de inducción con este fármaco y quimioterapia en este tipo de cáncer”, señala un comunicado del laboratorio Roche.

Ahora falta esperar que los organismos de control y regulación de medicamentos (la FDA –la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos–, la EMEA –Agencia Europea de Medicamentos–, y en Argentina, el ANMAT –la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica–) aprueben este nuevo uso del bevacizumab –que ya fue aprobado anteriormente para otros tipos de cáncer– para que pueda comenzar a aplicarse en pacientes. Un gran avance teniendo en cuenta que muchas de las mujeres con cáncer de ovario avanzado pueden presentar un pronóstico complicado con metástasis en otros órganos como hígado o pulmón. Hasta el momento, en estos casos la cirugía no resulta del todo efectiva y es necesario pasar a un tratamiento de quimioterapia; por eso, el Avastin –la primera terapia biológica que permite mejorar el pronóstico– resulta tan prometedor.

SCREENING ALENTADOR. La detección temprana del cáncer de ovario permite mejorar la sobrevida de la paciente, pero sólo el 20% de los casos se diagnostica en estadíos tempranos debido a que los síntomas no son claros y a veces suelen confundirse con otras enfermedades. La sintomatología más común es inflamación abdominal, dolor en la pelvis o en el abdomen, dificultad para ingerir alimentos o sensación de rápida satisfacción al comer, micción frecuente, cansancio, problemas estomacales, dolor de espalda, molestias durante las relaciones sexuales, estreñimiento y cambios en la menstruación. Por esta sintomatología difusa y confusa, y con la falta de tests diagnósticos de rutina (sólo se indica una ecografía transvaginal con tacto ginecólogico), este tipo de cáncer se confirma cuando ya ha avanzado bastante. “A veces las pacientes son muy estudiadas y, sin embargo, no se les detecta la enfermedad, por eso es muy importante escuchar a la paciente, interpretar sus síntomas y hacer un buen examen clínico”, sostiene la Dra. Zamora. Hoy las herramientas de screening para detectar cáncer de ovarios no son muy efectivas.

Sin embargo, en ASCO se presentó un test para mujeres postmenopáusicas, sin factores de riesgo, que mide los niveles de CA-125 (una proteína que se eleva en mujeres con cáncer de ovario) combinado con la edad de la paciente y analizado mediando un modelo matemático llamado Algoritmo de Riesgo de Cáncer Ovárico (ROCA, según sus siglas en inglés). “Más del 70% de los casos de cáncer de ovario son diagnosticados cuando están en estadíos avanzados, por lo que descubrir un screening confiable sería como hallar el Santo Grial”, declaró la Dra. Karen Lu, del Centro de Cáncer MD Anderson de la Universidad de Texas y autora principal del estudio que evaluó la efectividad de este test. “El algoritmo ROCA representa otro ejemplo de la medicina personalizada”, afirmó Blayney. Sin embargo se calcula que hasta el 2015 no va a poder ser utilizado como examen de rutina.

“El estudio es un paso adelante, ya que los niveles del marcador CA-125 en sangre pueden ayudar a detectar el cáncer de ovario. De ser confirmado con estudios más amplios (se está llevando a cabo en Inglaterra con 200 mil mujeres), podría ser una herramienta útil y relativamente barata para detectar esta enfermedad en sus estadíos más curables”, comentó Lu. El estudio involucró a 3.238 mujeres de entre 50 y 74 años, sin historia familiar de cáncer de ovario ni mama, y reveló una especificidad del 99,7%. Las mujeres comenzaron a hacerse el análisis de sangre cada año. Si indicaba bajo riesgo, se le volvía a hacer al año siguiente; si los niveles estaban elevados, se le repetía el examen a los tres meses; y si el riesgo resultaba más alto, se les indicaba una ecografía transvaginal y de acuerdo al resultado, se le indicaba o no una cirugía. A lo largo de los nueve años que llevó el estudio, ocho de las 3.238 mujeres fueron sometidas a la cirugía ya que se les detectó el cáncer de ovario en estadío temprano. El estudio del marcador tumoral CA-125 ya se aplica en nuestro país para los casos de mujeres con factores de riesgo (antecedentes familiares de cáncer de ovario, edad avanzada, no haber tenido hijos) y sospecha de la enfermedad.

Sin embargo, “este marcador puede elevarse debido a otras causas que no están relacionadas con cáncer de ovario, o, a veces, la paciente puede presentar la enfermedad y no tener elevado este marcador. Es frecuente que este estudio dé falsos positivos”, afirma la Dra. Zamora. Por eso es muy importante, el tacto ginecológico, la ecografía transvaginal y un buen examen clínico. Hacía 15 años que no había novedades para tratar el cáncer de ovario, una enfermedad con mal pronóstico ya que se detecta tarde. El nuevo uso de bevacizumab que demostró que extiende el tiempo de sobrevida y el nuevo screening que podría estar disponible en cinco años son, decididamente, buenas noticias que prometen, en un futuro cada vez más cercano, salvar la vida de miles de mujeres.
Textos Daniela Fajardo (enviada especial a Chicago).
fuente: para ti

Lolas, si o no?

A los 13 me gustaba ser chata, usar escotes redondos o soleros. Me creía con el físico de una bailarina y parecida a mi mamá. A diferencia de mis tías y abuela, nosotras (somos tres hermanas mujeres) no habíamos salido portentosas. Flacas escopeta, piernas formadas y torso de niña era nuestro look. Ser flaquitas y sin pechos estaba bien visto en la familia, eso por lo menos decía convincentemente mamá.
Mientras fui creciendo, no me molestaba mi condición de chata. Hasta los 20 iba contenta a la facultad con mi estilo camiseta, borcegos y jeans rotos.

Pero en algún momento la cosa empezó a cambiar. Creo que con los primeros novios. Alrededor de los 25 me empezó a dar vergüenza mi físico de nena y empecé a soñar con un buen par de lolas. Quería verme más mujer. Sentirme verdaderamente sexy y el combo camiseta-más-tabla no me convencía. Aunque moderadamente, me animé a fantasear con usar escotes tentadores, ponerme la bikini triangulito sin el riesgo de verme como una nena de 10 y evitar deprimirme al notar mi imagen “de nada”, sin ropa frente al espejo. Aún así me las ingeniaba para inspirar si la ocasión lo ameritaba. Por ejemplo, si tenía que salir, ir a una fiesta o a un casamiento, elegía algún atuendo que disimulara el escote, algo bien amplio, o bien cerrado, rara vez un intermedio…

Hasta que ¡aleluya! aparecieron en el mercado los corpiños con relleno. Y este fue un camino de ida… porque engañar desde el afuera, para luego llegar a una situación íntima desprovista de todo es algo que de antemano inhibe, molesta e incomoda. Cada vez compraba corpiños con más relleno –los de Victoria´s Secret eran especiales–, y al mismo tiempo, por esas cosas de la vida, tenía cada vez menos lolas. ¡El tejido mamario se va reduciendo al llegar a los 30, que me desmientan otras “chatas” si esto no es verdad!

Un día apareció un novio que dio luz verde a mis fantasías quirúrgicas. ¿Y por qué no?, propuso y en el primer instante me pareció una irreverencia atroz. Obviamente me dejó pensando y me descorrió un telón impensado hasta entonces. El telón del permiso interior. Por un lado, tenía la fantasía de volverme una Sophia Loren; pero, por el otro, me preguntaba si yo le gustaría a mi chico, así chatita y sencillita nomás. ¿Me querría más con lolas? ¿Me querría ahora, sin nada? Una batalla mental. Un terreno pantanoso. Nunca le trasladé estas dudas a él, que vivía ajeno a mi debate interior por mi exterior.

Pero un día me levanté dispuesta a avanzar. Y, sin asomarme a los vericuetos del diván, una mañana tomé mi costado más práctico y con la luz verde encendida me puse a averiguar operaciones, cirujanos, riesgos, posibilidades, formas, fantasías. Inclusive hablé con varias conocidas para enterarme de sus experiencias pre y post operación. Mi familia seguía mis pasos semi horrorizada y, como muchas otras veces en cuestiones personales, continué haciendo caso omiso de “las reglas” preestablecidas o mandatos familiares. A esta altura resultaba inevitable comenzar a hacerse el bocho de lo atractiva que una se vería con un profundo escote, cómo quedarías en traje de baño, cómo sería la relación con tu nuevo cuerpo, con respecto a vos misma y con los demás.

En ese entonces me daba vergüenza estar desnuda… si no tenía lolas. Incluso mis amigas me mandaban con humor fotos del antes y el después de mujeres que habían pasado por la operación. Y allí estaban, en mi compu, las transformaciones de Demi Moore, Brooke Shields y la local Araceli González. Ya había aprendido mucho.

También sabía de los problemas de encapsulamiento que habían tenido algunas modelos porque lo había leído en las revistas. Otra vez, no hice mucho caso. Busqué el cirujano de mayor reputación, la mejor clínica y las prótesis más modernas (las de superficie rugosa para evitar cápsulas) de manera de reducir al mínimo todos los factores de riesgo. Le tenía más miedo a la anestesia general que a los posibles problemas relacionados con las prótesis. Me dejé convencer por el cirujano que decía que el encapsulamiento podía suceder o no y que cada organismo es diferente. Mencionó que en algunos casos, a los 10 años, se sugería recambiarlas. A mí ese tiempo, en aquel entonces, me pareció una eternidad. Jamás me planteé cómo podría cambiar mi cabeza en ese lapso. Difícil hacerlo con semejante motor en marcha.

Cuando tenía todo listo y estaba casi decidida, mi novio, el que había tirado la idea de las lolas adquiridas, sorpresivamente dijo adiós y nunca más lo vi. El planteo inmediato fue ¿sigo adelante? Pero ya estaba decidida. Al fin y al cabo lo hacía por mí, no por él. Quería dejar atrás la chatura y volverme una geografía exuberante. Además, parar todo hubiera sido darle la razón al mundo de que él me había convencido. Era lo que yo quería.

Entré sonriente al quirófano y salí más sonriente aún. Las que estaban bien serias eran mi mamá y mis hermanas, a pesar de que todo había salido muy bien. En cuarenta minutos la transformación ya había sucedido, me desperté feliz de la anestesia y de la mano de mi cirujano: ya tenía mis amadas y queridas lolas. Ya no éramos todas chatas en la familia. Algo había cambiado. Estaban ellas, las chatas, y yo. Al mirarme la sensación era sorprendente, distinta. Me parecía que las lolas no eran mías. Perdí cierto pudor, o casi todo. Querés mostrarlas y no te da “cosita”. Es como exhibir algo que no es tuyo. Tampoco me daba impresión dejar que alguna amiga intrigada quisiera sentir la consistencia y tocarlas. Mis lolas eran un adorno y yo estaba feliz de mostrarlas. Pasé de estar siempre cubriéndome, sobre todo en la intimidad, cuando estaba más expuesta, a exhibirme. Los escotes pasaron a parecerme chicos e incluso llegué a plantearme que me había puesto poco (también algo común en las recién operadas). Disfruté de mis nuevas formas en todo sentido, en honor a la verdad.

Pero todo cambia. Y la balanza empezó a inclinarse hacia otro lado, unos cuantos años después, pasando los 40. De vez en cuando, empecé a mirar con cierta nostalgia a las modelos de alta costura o actrices chatas, delgadas, hermosas y elegantes. También a algunas amigas sin lolas que llevan muy bien sus escotes planos. A pesar de todo vivía feliz con mis lolas, todavía. Hasta que un buen día me cayó la ficha al descubrir que tenía una lola encapsulada. Fue en un chequeo médico. La derecha estaba más rígida al tacto y levemente aumentada de tamaño. Con el correr de los meses, se fue endureciendo más. Una piedra. La situación al día de hoy no ha variado. Y dependiendo del estado del ciclo en el que me encuentro, también se altera su volumen y peso. Desde aquel momento, el mundo me empezó a girar al revés: comenzaron las molestias cotidianas. No es lo mismo tener una “lola dura”.

Desde lo estético, si mirás con atención se ve la derecha más grande. Y son varias las molestias que provoca: ponerse boca abajo resulta muy incómodo (lo he comprobado en algunas clases de gimnasia), es como que si estuvieras aplastando una pelota con el pecho contra el piso. Lo mismo pasa al querer dormir boca abajo. Si querés correr, aunque sea unos metros –ni hablemos de las que practican footing– también se siente horrible porque se mueve como si tuvieras una gran piedra adentro: una pesa más que la otra y es como si llevaras una roca en el corpiño. En el momento del ciclo menstrual, cuando está inflamada, duele o pueden formarse ganglios en la axila.

Con la experiencia y el consejo médico, descubrí que si están bien sujetas las molestias disminuyen. Entonces, si hay días “peores”, uso un corpiño de esos deportivos que toman mejor e incluso algunas noches también lo incorporo para dormir. A esta altura ya no llama la atención que hasta haya variado levemente mi manera de vestir. Uso menos escote para que se vea menos la diferencia, remeras o suéteres más holgados o con menos lycra, que marcan menos el busto.

Con todo este “ruido” interior, empecé a pasarme el casete de mi vida y de mis decisiones. Coincidentemente, mi relación de pareja del momento estaba atravesando una crisis y mis temores y fantasmas empezaron a acrecentarse en todo sentido. Empecé a cuestionarme todo. Desde la primera relación, pasando por aquel novio que me incitó a que me las hiciera hasta mi decisión de seguir adelante. Todo en la misma bolsa.

Diecinueve años en unos días. Empecé a angustiarme también al escuchar noticias relacionadas con marcas de prótesis con fallas de fabricación. Empecé a “hacerme la croqueta”. Pero, como en todas las cosas, pasó el chubasco y amainó. Hoy, más tranquila, puedo evaluarlo desde otro lugar. Y cuando escucho en el trabajo que alguna chica se plantea la posibilidad de pasar por el quirófano, le digo que no, que lo mejor que puede hacer es aceptar su cuerpo tal cual es. Y le cuento lo que me pasó.

Es contradictorio. Reconozco que disfruté de mis lolas, pero también que mi madre tenía razón. Que sentirse bien no pasa por el afuera. Una frase perfectamente hecha y real.

No vivo totalmente relajada. El tema me preocupa. Ellas, las lolas, están ahí, pero de una manera diferente. Yo que antes quería mostrar, volví a cubrirme. Empecé a hacerme la idea de que quizá en algún momento deba operarme para hacer el recambio y hasta me pasé a un plan mejor en la prepaga por si no me queda otra opción que el bisturí. Pero ya el quirófano no me parece la salita feliz de antes, ni tengo ganas de pasar por una anestesia general.

¿Si vivo incómoda? De a ratos. Transito el camino de aceptar que me las hice y aceptar también todo lo que venga con eso. Las dudas, las formas, las redondeces, las imperfecciones, algunas rabias, ciertos miedos, autorreproches, inseguridades. Cosas de todos los días que hay que enfrentar, madurar y meditar para crecer y acercarse al misterioso camino de la felicidad y de la aceptación.

¿Si me arrepiento? Sí, pero lo hecho, hecho está. Las bolsitas como piedra o blandas, las llevo dentro. Una va relajada; la otra, tensa. Es un hecho contundente, hay que convivir con esto, y no hay marcha atrás que no sea otra cirugía. Por eso, si a alguien le sirve mi humilde opinión, no recomiendo ponerse lolas por nada del mundo. Sentirse sexy y aceptarse no pasa por el talle del corpiño. ¿Cómo darse cuenta de esto a los 20 y pico? ¡¡¡¡Difícil!!!! Por eso estas líneas.

fuente: para ti

miércoles, 9 de junio de 2010

El síndrome de la isla, o el miedo al compromiso

El temor de dejar de ser una persona autosuficiente o perder la independencia atenta contra la vida en pareja. Especialistas aseguran que "esconde" el miedo a crecer y se manifiesta de diferentes maneras.

Cómo reconocerlo:

Dejar de ser autosuficiente, autónomo, perder la independencia o el pleno dominio de su persona. Ésos son algunos de los temores que se plantean quienes ven a la madurez de su pareja como un peligro para su vida.

La edición de junio de Psicología Positiva publicó que reconocer los síntomas del síndrome de la isla permitirá tener una pareja satisfactoria.

Un interés desmedido por preservar los espacios propios y vivir como una invasión cualquier cambio al respecto, es una de las cualidades de quien padece este síndrome.

No embarcarse en proyectos comunes (ya sea un viaje o la compra de algo en conjunto), no mezclar los afectos o evitar que la pareja se contacte con las amistades, no pedirle ayuda a la pareja o mostrarle las "debilidades" para no otorgarle al otro poder o no hacer planes a largo plazo son otras de las características de este tipo de personas.

La principal razón por la que alguien teme involucrarse demasiado en una relación es el miedo a crecer. Esto es porque –en la mente de estas personas- formar su propia familia las hará alejarse del lugar de hijos y pasarán a ser personas mayores (padres) con todo lo que eso implica.

Tomo en todos los aspectos de la vida, tomar conciencia del problema es un gran porcentaje de su resolución. Así es que quien padezca el síndrome de la isla deberá saber que es posible vencer los miedos que actúan como "frenadores" y que aprender a mantener el equilibrio entre lo individual y lo común es sustancial a la hora de vivir armónicamente en pareja.

Un tratamiento promete detener los efectos del estrés en tres días

Desarrollado de manera exclusiva en el país, Revita Shock fue pensado para personas con agotamiento severo, que no tienen tiempo para interrumpir sus obligaciones. "Si no hay un cambio de hábito, el estrés vuelve".
Problemas para dormir, caída de cabello, cansancio generalizado, palpitaciones, falta o aumento de apetito, nerviosismo, irritabilidad, dificultad para concentrarse son sólo algunos de los síntomas de una persona estresada.

Si bien más de uno los identificaría como propios, pocos son los que tienen la oportunidad de tomarse el descanso que amerita el cuadro. Es así que, si bien el estrés per sé no es algo negativo, sino más bien una respuesta natural y necesaria por parte del organismo para la supervivencia, es la prolongación de ese estado lo que ocasiona problemas en la salud.

Es en ese contexto, y teniendo en claro que pocos son los que pueden parar el ritmo de sus actividades, que profesionales del Sanatorio Diquecito, de Córdoba, diseñaron Revita Shock, un tratamiento puntual capaz de renovar la energía y la vitalidad perdida, ayudando a superar el agotamiento producido por el estrés y el exceso de trabajo.

En una presentación a la prensa, el doctor Carlos Castells aseguró que el tratamiento "es una excelente ayuda para quienes necesitan continuar con sus obligaciones habituales, al no disponer del tiempo suficiente para un abordaje más profundo que busque solucionar la situación aguda de forma más integradora y orientada hacia la sustentabilidad de la salud en general".

El titular del programa anti-age LifeXtension de ese sanatorio explicó que las tareas que exigen una respuesta aumentada de las capacidades hacen uso de reservas que el organismo atesora para hacer frente a las mismas. "Pero el uso repetido de dichas reservas puede precipitar la falta de los nutrientes y sustancias biológicas energéticas, por lo que el organismo ingresa en una etapa de agotamiento físico y mental, ya que no tiene tiempo de reponerse", detalló el profesional.

Todo este complejo proceso deriva en una baja resistencia al estrés oxidativo, y actúa como desencadenante de una gran cantidad de enfermedades, acelerando de manera exponencial el proceso de envejecimiento, que se conoce como envejecimiento prematuro.

En el Sanatorio Diquecito todo está dispuesto para que el tratamiento sea un éxito. En lo que denominan el "corazón" del lugar, el área de Wellness cuenta con gabinetes médicos, salas de masajes, sauna, sector de hidroterapia, pileta climatizada y un gimnasio.

Dos comedores, uno donde sólo sirven comida light (porque en el sanatorio también realizan programas de adelgazamiento) y otro para quienes van a desestresarse, una sala de uso común (con televisor, área de lectura y wi fi), pileta y canchas de tenis, voley y bochas completan las comodidades a las que tiene acceso todo el que desee pasar una estadía con las sierras cordobesas como marco.

El tratamiento
Las reservas energéticas agotadas a causa del estrés pueden reponerse de manera natural, mediante la implementación de un plan de alimentación saludable, ejercicio y descanso de por lo menos 15 a 30 días, con la adición de diferentes complementos alimenticios.

Pero aquellas personas que no disponen de este tiempo, necesitan indefectiblemente de un aporte externo en altas dosis, tal como el que propone Revita Shock, por medio de la reposición de las sustancias perdidas, lo que permite obtener los beneficios en tan sólo tres días.

Así, mediante el uso de dos sustancias de origen biomolecular, el abordaje terapéutico buscará entregar al organismo una carga rápida de energía y elementos que el cuerpo perdió en su intento por mantener el equilibrio.

Las Bioestimulinas son sustancias producidas a partir de plantas y alimentos que ayudan a reparar el ADN y las Inmunoestimulinas trabajan sobre modulación y reparación del sistema inmune, uno de los más resentidos por el estrés. "El sistema inmune hace de alerta del organismo ante el ingreso de un virus o bacteria, por eso las personas estresadas se enferman más", aseguró Castells.

"El procedimiento consta de dos fases: una inyectable y otra vía oral. Esto se debe a que algunas sustancias demoran mucho tiempo en reponerse por vía oral mientras que, en cambio, por vía inyectable logran normalizar los niveles de manera efectiva y rápida", detalló el especialista, quien destacó: "Este equilibrio bioquímico también denominado Orthomolecular es indispensable para volver a un estado saludable y estar preparado para reaccionar ante situaciones estresantes, deteniendo el daño celular".

El profesional remarcó que el tratamiento "no es estimulante del Sistema Nervioso Central", muy por el contrario es lo que acostumbran hacer las personas estresadas, que suelen consumir sustancias que estimulan, como cafeína o energizantes. "Acá queremos que el paciente baje las revoluciones, no que siga al mismo ritmo", dijo Castells.

El tratamiento comienza con el ingreso del paciente al sanatorio el jueves a la noche, donde permanecerá hasta lunes por la mañana. En ese tiempo se recuperan el 90% de las sustancias que naturalmente protegen el organismo y se evita que el daño avance.

Luego del ingreso a Diquecito, la apertura de la historia clínica marca el inicio del tratamiento. A continuacuón, la determinación de alergias, intolerancias y medicamentos y/o terapias actuales que el paciente pueda estar siguiendo darán a los profesionales las pautas para el correcto desarrollo.

"Se realiza un chequeo de ingreso tendiente a descartar otras causas médicas de fatiga y, una vez determinado que se trata efectivamente de una situación de agotamiento psicofísico, se estudian los parámetros bioquímicos que sean indicadores de daño producido por el estrés", explicó Castells.

Así, un test de saliva permitirá establecer los niveles de glucocorticoides, que determinan el estrés del paciente.

Descartadas otras causas de fatiga patológica se pasa a la segunda fase, que consiste en formular el tipo de tratamiento más aconsejable para cada paciente.

Tras asegurar que los resultados que primero se observan son los inmediatos, como son el incremento de energía y vitalidad, Castells subrayó que en el largo plazo, "este tratamiento detiene el daño ocasionado por el estrés".

Si bien el profesional destacó que "lo novedoso de estas sustancias es que frenan el daño ocasionado por el estrés", hizo hincapié en que "si no hay un cambio de hábitos de vida, el estrés vuelve", o sea que los beneficios de Revita Shock se prolongan "en la medida que se modifiquen hábitos de vida".

"El efecto dura hasta que la persona vuelva a agotar las reservas", sintetizó, para luego agregar que "el estrés saca de punto todo el organismo".

Al remarcar que Revita Shock es un "tratamiento exclusivo" (los medicamentos utilizados están aprobados por la Anmat y patentados por Sanatorio Diquecito) y que no hay antecedentes iguales, "aunque sí en el uso de los componentes", Castells enfatizó que lo que en la provincia mediterránea realizan es "medicina basada en evidencias".

"En el país hasta el momento sólo hay terapias no avaladas científicamente", incidió, al tiempo que informó que el tratamiento tiene un costo de entre 7.500 y 10.500 pesos, que incluye la estadía, el tratamiento y los estudios.

martes, 1 de junio de 2010

Mujeres solas a los 40, ¿karma o elección?

Por priorizar su desarrollo profesional o laboral, cada vez son más las mujeres que deciden estar solas, o mejor dicho, no tener una pareja "formal"; "tener pareja es un objetivo, que, como cualquier otro depende de cada uno alcanzarlo".
Hay mujeres a quienes la soledad les "pesa". Y más aún a medida que pasan los años. Si bien no se trata de una problemática netamente femenina, suele asociarse este tema al sexo femenino porque los hombres toman su "soltería" de una manera más tranquila y relajada.

Para saber cuánto influye la suerte, la predisposición, o sencillamente el hecho de dedicar la vida a la profesión -y en qué medida es el reloj biológico el que en un momento "apura" la búsqueda de pareja- Infobae.com consultó a la licenciada Florencia Torzillo Álvarez (MN 30624).

Bajo la premisa de que la decisión de estar en pareja siempre está en uno, la profesional del Instituto de Psicología Argentino (Inepa) aseguró que "no encontrarla (a la pareja) refleja una dificultad".

La soledad, ¿es una cuestión personal o una presión social?
Es común escuchar, tanto a los hombres como a las mujeres, lo difícil que es encontrar pareja. Existen muchos mitos y prejuicios sociales respecto a la vida sin pareja que empeoran aun más la situación. En nuestra sociedad se toma como curso natural de la vida, crecer, tener una pareja y formar una familia y el vivir solo por mucho tiempo, es visto como sinónimo de fracaso.

Muchas personas disfrutan de su soledad pero sienten en el fondo que "deberían estar en pareja", como si de pronto escucharan en su interior un mandato social que los hiciera sentir incorrectos por tener 40 años y aún no formalizado ninguna relación o pasar mucho tiempo sin ella. En el caso de las mujeres la presión es mayor.

¿Y vos para cuando?...¿Nunca un novio/a?...Vas a quedar solterona si seguís así...Sos demasiado/a exigente. Estos mandatos sociales muchas veces hacen que las personas sientan una gran presión y confundan sus deseos con las imposiciones sociales: muchas veces, es la mirada del otro la que nos define, y son los otros, los que nos retribuyen y atribuyen, con sus criterios y valores, cargados de deseos e intenciones.

La soledad no siempre es negativa y cada vez más gente elige vivir sola, más bien es vista como un problema en la medida en que se viva como una carencia.

Por otro lado, están aquellos que desean profundamente enamorarse, casarse y tener hijos y luego de muchos intentos frustrados, presentación y salidas sienten que nunca lo van a lograr, se sienten frustrados.

Es importante cumplir nuestros propios proyectos de vida en función a nuestros deseos. Si la vida en pareja es una de nuestras metas, es bueno proponernos cumplirla.

¿Hay mujeres solas a los 40 por elección?
Cada vez más son las mujeres que eligen no tener pareja o al menos no formalizar con ninguna.

La proporción de mujeres que eligen estar solas va creciendo, y esto lejos de ser una situación alarmante, se está convirtiendo en una opción que cada día atrae a más mujeres.

Generalmente aquellas que deciden vivir solas tienen un nivel social y económico alto, vuelcan la mayor parte de sus energías al éxito profesional/empresarial, se encuentran más centradas en sí mismas y en sus deseos. Frecuentemente les interesa tener una pareja ocasional.

Esto lejos de ser negativo, es tan válido como el deseo de la familia tradicional.

Las que no lo elijen, ¿cómo viven esa soledad?
Están las que se encuentran solas porque se separaron de sus parejas o porque no encontraron al hombre adecuado, sienten una profunda desilusión, tristeza, negación y/o alegría ficticia, rencor; rabia y envidia (hacia las que lo lograron) pero principalmente el no saber cómo lograr ese objetivo tan anhelado les provoca mucha ansiedad y frustración. Es que aún existen muchas mujeres que no conciben la vida sin el amor de un hombre y no pasa el día en que se lamenten de no tener uno a su lado.

Están las que prefieren estar solas por temor a repetir relaciones tóxicas. Otras, por tener un umbral más elevado de exigencias para decidirse a resignar su soledad.

Hay solas por cuestiones de carácter o personalidad, que les cuesta vivir en pareja, y al revés, mujeres que les cuesta vivir en soledad. Las mujeres que desean tener una pareja y no logran conseguirla a medida que van pasando los años lo viven con mayor angustia, sobre todo, aquellas que desean ser madres.

A medida que el tiempo pasa los fantasmas y los miedos se van haciendo cada vez más grandes.

Pero yo me preguntaría: ¿las cosas que nos suceden en la vida son por suerte o porque nos propusimos un objetivo e hicimos todo para que este se cumpla?

Es importante remarcar que tener una pareja es un objetivo como cualquier otro que nos proponemos en la vida, como conseguir trabajo.

Muchas personas sienten que es una cuestión de azar o suerte del destino, y que aun no fueron "las elegidas".

¿Qué ocurre cuando el principal obstáculo se encuentra en nosotros mismos? ¿Qué hice y que no hice para impedir que llegue esa persona?

¿Qué rol juega la postergación de la maternidad?
La maternidad juega un rol importantísimo en la angustia de las mujeres al no conseguir pareja.

Muchas te dicen: "yo no sé si quiero ahora tener pareja pero quisiera asegurarme que en unos años la voy a tener y no correr el riesgo de no poder ser madre".

El auge en el último tiempo de los tratamientos de fertilidad, permitió a las mujeres extender su periodo fértil unos cuantos años. Es por eso por que en la actualidad muchas optan por preservar sus óvulos en instituciones dedicadas a este fin. Otras al terminar sus periodos fértiles deciden adoptar e incluso muchas sin pareja.

¿Qué ocurre con los hombres, la soledad y la edad?
Existe la creencia de que el mundo está lleno de mujeres solteras y de hombres en pareja, y esto no es tan así. Hay hombres solos deseosos de formar una pareja, lo que ocurre es que toman su "soltería" de una manera más tranquila y relajada a la espera de la mujer que les guste.

Los hombres pareciera que tienen muchos más "permisos sociales" para estar solos y disfrutar de la soltería que las mujeres. Esto no quiere decir que no sufran su soledad, pero quizá lo hacen de una manera diferente.

Al tener un periodo fértil mucho más extenso que las mujeres, la formación de la familia no es una presión para ellos, si bien lo es, el quedarse excluido de los grupos de amigos que ya formaron pareja y familia. Son felicitados muchas veces por éstos, pero paralelamente son excluidos o se autoexcluyen, hartos de las conversaciones de niños.

¿Cómo ven los hombres a las mujeres solas de más de 40?
La preocupación de la mujer es siempre pensar qué piensa el hombre. Sin pensar que esta preocupación es más femenina que masculina.

Actualmente hay muchos hombres jóvenes que salen con mujeres más grandes y viceversa, hay muchos hombres grandes con mujeres jóvenes. Pareciera que el ideal de juventud eterna sostenido en nuestra sociedad se consigue a través del compañero/a más joven elegido.

¿Quien así lo desee, cómo puede dejar de estar solo? ¿Cuáles son los ámbitos en los que una persona de esa edad puede conseguir pareja?
Si uno quiere dejar de estar solo y a lo largo de su vida experimentó dificultades para lograrlo, es importante que uno tome conciencia y se observe para descubrir qué le está pasando, qué es lo que le impide llegar a su objetivo.

El común denominador de varias situaciones que nos suceden en la vida marca que somos nosotros mismos, muchas veces, los que anticipamos el fracaso y en consecuencia, contribuimos a generarlo.

En nuestra sociedad de características posmodernas, las personas tienden a establecer vínculos superficiales, carentes de intimidad, por lo tanto superfluos y descartables rápidamente.

Muchas veces las personas que se encuentran en esta situación es debido a miedos a crecer o extensión de la adolescencia y de esta forma no consiguen pareja porque el conseguirla significaría pasar de etapa de la vida.

También existen los enamoradizos que necesitan estar todo el tiempo en periodo de conquista, el placer pasa cuando al otro no lo tengo así puedo "conquistarlo".

Algunas personas de baja autoestima insisten en lo "perdido", entonces sienten que si esa persona los acepta nuevamente es como si les devolviera el poder y la confianza, por ende quedan atrapados durante largos periodos en la "reconquista".

Muchas de estas situaciones se generan por experiencias negativas a lo largo de nuestra vida o por situaciones estructurales de nuestra personalidad.

Estas y otras más dificultan lograr tener una pareja estable con quien plantearnos proyectos y sentirnos bien.

Al parecer, el panorama no es tan desalentador y se trata de intentar algunas salidas. Las verdades siempre están dentro de nosotros.

Un buen comienzo sería, por ejemplo, pensar qué estamos haciendo para revertir la soledad. El protagonismo que tenemos en nuestras propias vidas es innegable y, por eso, no siempre el destino es completamente responsable de todo lo que nos sucede.

Por eso el estar solo como cualquier otra situación que nos sucede en la vida y que no nos gusta se puede modificar.

¿Cómo? Planteándonos que esto de tener una pareja es un objetivo, como cualquier otro y depende de uno el poder alcanzarlo. Es cuestión de aprender, reaprender o modificar aquellas conductas que nos alejan de nuestro objetivo.

En muchos ámbitos uno puede conocer una pareja, realizar nuevas actividades como cursos, talleres de formación, deportes grupales, viajes…. cualquier ámbito puede serlo, lo importante es descubrir aquello que estamos haciendo para no lograrlo.
fuente: infobae