lunes, 24 de septiembre de 2012

Depilación definitiva

La depilación definitiva, consiste en aplicar una luz pulsada intensa en el vello, esta luz viaja a través del folículo piloso hasta la raíz, impidiendo que vuelva a crecer. La depilación definitiva es el tratamiento de medicina estética que más auge ha tenido en los últimos años. Gracias a los avances en tecnología médica, actualmente es posible practicarse una depilación definitiva que le dé solución al problema del vello excesivo, sin tener que gastar grandes sumas de dinero. Además, los avances tecnológicos hacen que los tratamientos se vuelvan cada vez más eficaces en la lucha contra el vello, obteniendo mejores resultados en menos tiempo. La depilación definitiva, consiste en aplicar una luz pulsada intensa en el vello, esta luz viaja a través del folículo piloso hasta la raíz, impidiendo que vuelva a crecer. Generalmente se recomiendan entre 4 y 8 sesiones para obtener los resultados esperados, estos dependen del ciclo de crecimiento del mismo. El crecimiento del vello, al igual que cualquier proceso de la naturaleza, sigue un ciclo biológico, este consiste en crecimiento, maduración, reposo y caída, y vuelta a crecer. Para que el tratamiento sea efectivo el vello debe encontrarse en la etapa de crecimiento. Como este proceso no se da en forma homogénea en todo el vello, sino que este crece a destiempo, son necesarias varias sesiones para que el procedimiento sea efectivo y abarque todos los vellos del área tratada. Dependiendo del tipo y color de vello, puede ser mas afectivo el tratamiento de luz pulsada o el de laser, esto deber ser siempre evaluado por un profesional y en muchos casos es necesario usar ambos tratamientos combinados para lograr un resultado acabado. La depilación definitiva, además de eliminar el vello, ayuda a eliminar los pelos encarnados y a mejorar la calidad de la piel de la zona tratada, ya que además incentiva la producción de colágeno y elastina. Otras ventajas de la depilación definitiva son: es indolora, no quiere anestesia, no deja marcas, no es invasiva. Es fundamental que el tratamiento sea aplicado por médicos especializados en salud estética y en consultorio. Es la mejor garantía que tiene la paciente sobre la seriedad y profesionalidad de quien realiza el procedimiento. para ti

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Problemas con la lactancia.

Te voy a contar mi historia con mi 2do hijo, por ahí te ayude. Si los pezones están preparados durante el embarazo no vas a tener problemas. El problema surge cuando no los preparamos durante el embarazo, no importa si es el 2do o el 3ro; en cada embarazo hay que prepararlos, salvo que tengas la suerte de tener unos pezones muy justos para la boca de tu futuro hijo; aunque igualmente la piel al estar seca, se pueden lastimar, por eso hay que lubricarlos y prepararlos. Se recomienda hacerlo desde el 3er mes en adelante ya que en los últimos meses, tocar los pezones puede provocarte contracciones. Paso a contarte mi historia personal; cuando nació mi 1er hijo, me preparé los pezones con crema de caléndula y tuve una lactancia espectacular. Me dolió solo cuando me bajó la leche, que lo hizo al 5to día de haber tenido familia; me bajó muy de golpe y tenía que deshinchar mis pechos porque me dolían mucho y para que no me agarre la bendita mastitis. Para eso, me metía en la ducha y me ordeñaba…si si…tal cúal vaquita, me ponía paños calientes (con la plancha) en los pechos y me sacaba. Eso duró un día. Luego se regulariza sola. Con mi 2do hijo, pensando que ya tenía preparados los pezones por ser el 2do embarazo no hice nada. El día que nació, gracias a mi experiencia de madre, la bebé prendió sin problemas al pecho, ese día comió re bien. A los días siguientes los pezones se me empezaron a lastimar y me dolían mucho. Al 5to día tuve la bajada de leche y me saqué con un saca leche q me prestaron más la toma de la niña, pero tenía los pechos muy lastimados y lloraba del dolor, por lo que estimo no me saqué lo suficiente y me agarro mastitis: fiebre, escalofríos y pechos duros. El ginecólogo me dio un remedio para eso y me dijo q me siga sacando leche. Me puse almohadillas de gel calientes en el pecho para que afloje la leche que tenía dentro. Los pechos seguían lastimados ya que la bebé tenía la boca muy pequeña y succionaba mal, entonces empecé a cambiar las posiciones y ponerla acostada vertical sobre un almohadón, ahí cuando tomaba me dolían menos. Pero mi hija empezó a vomitar coagulitos de sangre de mi pecho lastimado, entonces el pediatra me recomendó 2 cremas para los pezones (cicatrizante y caléndula), aire en ellos, y que trate de sacarme más leche y menos de la boquita hasta que se me curen un poquito. Encima mi hija no engordaba y se debía a mi estrés por esta situación; ya que cuando se regularizo todo, empezó a engordar de a 1 kg por mes. No les puedo mentir y no decirles q la pasé muy mal, me deprimía porque no podía darle la teta bien, estaba dolorida, y las cremas me tenían arta. Todo este proceso en total, duró un mes. Luego los pechos se me cicatrizaron y hoy mi hija toma exclusivamente pecho y está muy gordita y sana. No sé si será verdad o no, pero gracias a Dios no se me ha enfermado aún y eso q mi hijo de 5 años se enfermó varias veces por el jardín de infantes. Si les tengo que dar un consejo es que tengan paciencia, que la lactancia al comienzo como todo, puede ser complicada, pero que vale realmente la pena insistir. Lo fundamental mamá, es preparar los pezones. Éxitos y paciencia!!!!