martes, 2 de diciembre de 2008

Si su hijo tiene miedo por las noches, puede que lo herede de usted

Así lo sugiere un reciente estudio, según el cual los terrores nocturnos, que hacen llorar desconsoladamente a los niños, son al menos parcialmente hereditarios

La investigación fue publicada en la revista Pediatrics.

"Nuestros resultados muestran que hay un efecto sustancial de factores genéticos en los terrores nocturnos", aunque no se identificaron genes específicos detrás del fenómeno, indicó el equipo del doctor Bich Hong Nguyen, del Centro de Desórdenes del Sueño del Hospital Sacre-Coeur de Montreal, en Canadá.

En un estudio con 390 pares de mellizos y gemelos, los investigadores revelaron que los gemelos eran mucho más propensos a experimentar terrores nocturnos que los mellizos.

Los gemelos tienen conformaciones genéticas casi idénticas, mientras que los mellizos no. Estos hermanos suelen estudiarse debido a que su conformación genética similar puede brindar información sobre enfermedades y otros problemas.

Los investigadores también señalaron que los factores ambientales podrían ser parte de la causa de los terrores nocturnos, dado que los mellizos se crían juntos en ambientes muy similares.

A diferencia de las pesadillas, "la aparición de los terrores nocturnos es abrupto y aterrador, generalmente con un despertar repentino con gritos", indicó el estudio.

"Durante esos eventos, los niños parecen confundidos y desorientados. Cualquier intento por despertarlos aumentaría su agitación y prolongaría el episodio", agregaron los autores.

No obstante, los terrores nocturnos son breves, cesan abruptamente y el niño suele volver a dormirse sin recordar nada sobre el episodio, señaló el informe.

En general, el equipo halló que el 37% de los mellizos tenía terrores nocturnos a los 18 meses y que el problema desaparecía un año después en casi la mitad de ellos.

Investigaciones previas mencionadas en el informe demostraron que los factores genéticos serían un factor en algunos casos de sonambulismo, conversaciones durante el sueño y pesadillas.

Otro estudio indicó que el 19% de los niños de 4 a 9 años experimentaba terrores nocturnos.

Fuente: Reuters