miércoles, 15 de julio de 2009

Sepa qué destruye a los matrimonios

Investigadores de Australia encontraron el remedio para que una pareja se mantenga unida, el cual supone más que estar enamorado.


La edad de una pareja, las relaciones anteriores y si fuman o no son factores que influyen en la duración del matrimonio, según un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad Nacional Australiana.

El estudio, llamado What's Love Got to Do With It (¿Qué tiene que ver el amor con esto?) , observó a cerca de 2.500 parejas, casadas o que vivían juntas, desde 2001 hasta 2007, para identificar los factores asociados a aquellos que siguieron juntos y a quienes se divorciaron o separaron.

Llegaron a la conclusión de que un marido que es nueve o más años mayor que su mujer está dos veces más dispuesto a divorciarse, al igual que los hombres que se casan antes de los 25, según publica hoy el portal 20Minutos.

Los niños también influyen en la duración del matrimonio o la relación, habiéndose separado un quinto de las parejas que habían tenido hijos antes del matrimonio, tanto de una relación anterior como con la misma pareja, frente a apenas el 9% de quienes no tuvieron hijos antes del matrimonio.

Las mujeres que quieren reproducirse mucho más que sus parejas también son propensas a querer el divorcio.

Los progenitores de la pareja también juegan un papel en la relación, y el estudio mostraba que un 16% de hombres y mujeres cuyos padres se habían divorciado o separado hacían lo propio, frente al 10% de los hijos de parejas no separadas.

Las parejas que están en su segundo o tercer matrimonio tienen un 90% más de probabilidades de divorciarse que una pareja en la que para ambos es el primer enlace.

Cuestión de dinero
Aunque no sea una sorpresa, el dinero también aporta su granito de arena. Hasta un 16% de los encuestados que se habían declarado "pobres", o en casos en los que el marido -no la mujer- no tenía empleo, se habían separado, mientras que de las parejas con dinero sólo se había separado el 9% de los casos.

Los factores que demostraron no tener especial relevancia en la separación fueron el número y la edad de niños nacidos en el matrimonio, la situación laboral de la mujer y el número de años que la pareja había tenido trabajo.