viernes, 19 de junio de 2009

Vive sola, sin soledad

Una experiencia sumamente enriquecedora para tu crecimiento personal, con una sensación de independencia embriagadora y apasionante.

A muchas mujeres les aterra quedarse solas, aunque sea un solo día, no soportan el silencio que implica estar en soledad. Cuando están en casa, tienen siempre la televisión encendida para sentirse acompañadas, hablan por teléfono por horas o se conectan a internet para calmar la sensación de vacío interior que las agobia.

Pero para muchas mujeres, esta experiencia se ha transformado en un estilo de vida muy positivo, porque les permite conocerse mejor a sí mismas y encauzar su propia vida. Divorciadas, separadas, viudas o jóvenes solteras, cada vez más mujeres deciden vivir solas por su propia elección, después de sufrir alguna crisis o simplemente por el hecho de disfrutar de la experiencia, que puede ser sumamente enriquecedora y ayudar al crecimiento personal, cuando es elegida por propia voluntad.

Una sensación embriagadora

Vivir sola, aunque sólo sea una temporada, siempre que sea una elección propia, te ayuda a crecer como persona, a vencer miedos y explorar tus propias capacidades. Cuando superas la ansiedad inicial y el miedo a lo desconocido, la sensación de independencia puede ser embriagadora y apasionante.

De hecho, muchas mujeres que pasan por la experiencia de vivir solas lo piensan mucho antes de iniciar una relación de convivencia y renunciar a los dulces frutos de la libertad. Se han acostumbrado a sentirse autónomas y no están dispuestas a que les corten esa encantadora independencia.

Estar sola es algo muy positivo

De acuerdo a los testimonios de muchas mujeres que han decidido vivir solas y a los expertos en psicología, estar sola es algo positivo porque:

• Eres tú misma al 100%. Cuando vives con alguien, entras en cierta simbiosis con esa persona aunque no lo desees, y renuncias a partes de tu propia personalidad que te producen bienestar, porque no las puedes compartir con el otro. En cambio cuando vives sola, controlas tu propia vida, realizas tus inquietudes, tienes más tiempo para ti, para volcarte en tus actividades, pasatiempos y vida social.

• Ayuda a aclarar tu mente. Cuando te ocurren situaciones de estrés laboral o familiar, quedarte un tiempo a solas te ayuda a distanciarte de los conflictos y a encontrarles una mejor solución. Logras balancear mejor los aspectos favorables y desfavorables del asunto, sin que nadie influya.

• Permite apartar el miedo a mirarte por dentro. Muchas mujeres se rodean de ruido, actividades y gente, para no enfrentarse a sí mismas. Pero después de un tiempo de estar en soledad, te das cuenta de que no es algo tan terrible e incluso puede ser muy agradable, es una gran oportunidad de reflexionar en tu vida, corregir tus propios errores y definir tus metas.

• Mejora tus relaciones personales. Al estar más relajada, es más fácil evitar conflictos con los demás y si éstos surgen, estás en mejores condiciones para resolverlos, ya que conocerte más a ti misma te da una perspectiva distinta de las cosas y reaccionas diferente. Además valoras más las relaciones y utilizas todos tus recursos para socializar mejor y con consciencia.


19 de junio de 2009 (Agencias)